domingo, 15 de enero de 2017

6 cosas que cambian en una mujer cuando deja de ser inocente

¿Has pensado alguna vez en ser la primera vez en la vida de alguna chica? Bueno, si quieres saber si una chica sigue “pura”, pues este es el lugar correcto, solo sigue leyendo este contenido.
Estas son seis señales que hacen diferenciar a una mujer sin experiencia a una con mucha experiencia. Esto en la actualidad no es de gran importancia, pero si aun así quieres saberlo, aquí están:

1.       La Boca.

Las que aún son inocentes en tal aspecto tienen la boca pequeña, cuando se ríen sus labios se contraen. Las que ya pasaron por esa experiencia ríen con gran seguridad, y se les antoja más besar.

2.       La Mirada.

Las inexpertas tienen una mirada sincera e inocente, las pupilas lucen relucientes y claras, en raras ocasiones aguantan la mirada fija de un chico, y suelen reír de los nervios. Por otro lado las que ya conocen sobre esto no tiene miedo a demostrar atracción, y además su mirada te da invitación a hacer lo que desees.

3.       La forma en que camina.

Dan pasos más cortos y firmes, tienden a caminar despacio y pareciera que van levitando o deslizando los pies, las expertas caminan con seguridad, dan pasos largos en cualquier tipo de zapatos.

4.       Se comportan bien.

Las que no tiene experiencia son transparentes, es decir, no tienen malicia, cambian de tema rápidamente, y sobre todo no hablan de hacerlo. Sin embargo si ya ha mantenido ciertas relaciones, hará bromas sobre el asunto, y no tendrá miedo de este tipo de conversaciones.

5.       Siempre andan en lugares públicos.

Hacer una salida para no estar solos y que la tentación les gane, ver una película? NUNCA, ella va a preferir ir a algún cine y que la sala esté relativamente llena. Si ella tiene ciertas experiencias no tendrá el miedo de estar a solas contigo tanto si tiene o no tiene ganas, está consciente de que puede pasar, pero no le teme a eso.

6.       El test del hilo.

Es muy alocada pero real. Esta técnica consiste en, con una cuerda delgada mides las circunferencia del cuello de la chica, tienes que tratar de que se vea lo menos raro posible. A la medida que obtengas le agregas el doble, luego le pides que pase su cabeza a través de tal medida. Si la pasa sin problemas, pues ya no es tan santa que digamos.